Que sin excepción son presentadas como actos de una premeditada secuencia.Situación que sin dudas ha sido utilizado para estigmatizar y demonizar a quienes tuvieron la responsabilidad de presidir y dirigir tal gobierno.Es decir lo que se busca es establecer principalmente que el GM se impuso mediante una "política permanente de "Terror de Estado".
Tanto la comisión Rettig, como posteriormente la comisión Valech, ambas nombradas por los gobiernos de la "concertación" (Aylwin y Lagos), con el objetivo de aclarar los hechos ocurridos, mediante la investigación "imparcial"(sic), y la entrevista de testigos tanto civiles como militares involucrados, no dieron los resultados esperados.
Los informes presentados por ambas comisiones, no conciliaron al país, por lo contrario abrieron nuevas heridas. Como tampoco pudieron satisfacer las demandas de los familiares de las víctimas de estos luctuosos hechos. Los resultados del trabajo de estas comisiones, han servido para agudizar aún más la división social del país, también dieron paso al aprovechamiento ilícito de las compensaciones monetarias, y pusieron las bases que justifican procesos indebidos y la violación de la Ley.
Las comisiones antes que acabar con el sesgo político para enfrentar esta situación de violaciones a los DD.HH, pusieron en manos de la izquierda las herramientas necesarias que necesitaba para "vengarse" abiertamente de aquellos que evitaron que impusieran la "dictadura del proletariado".
Durante los años anteriores y posteriores a los informes, como ya lo hemos mencionado, la izquierda y otros grupos, a los sucesos que tuvieron relación con la violación de los DD.HH., de terroristas de izquierda o relacionados, les han dado un uso tendencioso, y cuyos alcances no sólo ha afectado la vida de los directamente involucrados, sino que también a un gran número de familiares y destacadas personalidades que se relacionaron con el Gobierno Militar. Existen muchos ejemplos de esta falaz situación dirigida primordialmente por la izquierda. Los casos más emblemáticos son las muertes de menores ocurridas, ya que de hecho el impacto que producen es 100 por ciento mayor que aquellas que se relacionan, con adultos, miembros o relacionados con actividades subversivas y el terrorismo.
La mayoría de los menores murieron por causas, hoy día inaceptables, no obstante teniendo presente que ninguna muerte sobrevenida en circunstancias ilícitas tiene justificación, también estamos obligados a reconocer, que estas muertes, ocurrieron en el marco de un contexto calificado y reconocido como de anormal y de absoluta "excepción".
Es imprescinbible que los hechos sean aclarados y juzgados. Ello porque existe la necesidad de mitigar en parte el dolor de los familiares de las víctimas y a la vez recompensar y reparar materialmente las pérdidas de vidas humanas. Sin embargo concientes de que esto no puede ser todo, hemos mencionado que se hace necesario enjuiciar a los autores. ¿Cómo? Es imprecindible entender que la "justicia ordinaria" no tiene competencia al respecto, ya que los hechores cometieron las faltas realizando funciones de seguridad asignadas y requeridas por el Estado, dirigido por las FF.AA. y de Orden, y por más que nos parezca contradictorio, el Estado nos guste o no, procedió en su momento a resolver las situaciones.
Por consecuencia, y esto de acuerdo al desarrollo de los acontecimientos, que condujeron a cambios graduales en la gestión administrativa del Estado, impulsados de acuerdo a la Institucionalidad impuesta por el GM, aprobada y aceptada por la Nación entera, y que se encuentra vigente hasta el día de hoy, los juicios a las personas relacionados con la violación de los DD.HH., no pueden ser iniciados, ni investigados, ni menos sentenciados, por jueces regulares, ni tampoco por la justicia militar, sin que de paso se contradiga la ley y la Institucionalidad mencionada. Vale decir las leyes vigentes y la institucionalidad actual obligan a sobreseer los casos. ¿Impunidad para los crímenes y sus autores? Por supuesto que no.
Ello, porque es imprecindible conocer la verdad. Todos los crímenes, relacionados con la situación política de Chile, ocurridos entre 1964 y 1990 debieron ser juzgados. ¿Por la justicia ordinarios y/o militar?
Con el advenimiento de la democracia,la obligación de resolver la situación recayó sobre el legislador, sobre los gobernantes encargados de dirigir el Estado. Todos los políticos, tanto de ayer como de hoy saben que esto es un asunto pendiente, y que no han hecho lo que corresponde. Los actores políticos de la Nación tienen la obligación de encontrar las formas y fórmulas que concilien nuestra sociedad, que se respeten las leyes vigentes, y que por ningún motivo se haga justicia, faltando o falseando la misma.
Y tanto la izquierda y la derecha política chilena, en los sucesivos de la "concertación", motivados por distintos afanes y mezquindades han usado esta situación, y no han hallado la solución que correspondía.
El caso de CARLOS PATRICIO FARIÑA OYARCE es un ejemplo dramático.
El menor, un adolescente de 13 años de edad, delincuente y repudiado por vecinos del sector, fue detenido el día 13 de octubre de 1973 en su domicilio de la Población La Pincoya durante el transcurso de un allanamiento practicado en dicha población por efectivos del Ejército, Carabineros e Investigaciones.
La Población La Pincoya de la comuna de Huechuraba, queda al norponiente de la comuna de Vitacura. Es una de las poblaciones más pobres y con mayor índice de delincuencia de Santiago y de Chile, donde impera la violencia, la prostitución y el tráfico de droga. Paradojalmente valga mencionarlo, durante el gobierno de la UP y los de la "concertación", este sector poblacional no fue, ni ha podido ser controlado en su totalidad por la autoridad policial, el clima de inseguridad que viven los pobladores en esos centros poblacional es total, ya que distintas bandas de delincuentes imponen su voluntad, y que se mezclan con extremistas de izquierda, que usan esta población (y otras) como refugio y sede, de sus cuadros terroristas.
Durante el Gobierno Militar, esta situación fue absolutamente controlada, aunque no eliminada en su totalidad, el poblador común experimento la bonanza de la seguridad, ya que los delincuentes fruto de las drástica medidas tomadas por la autoridad, en virtud de los estado de Sitio primero, y de Emergencia posteriormente, se replegaron o cayeron presos, eventualmente algunos fueron muertos en enfrentamientos con la fuerzas de seguridad.
Las circunstancias.
Nada justifica su muerte, y en el caso del menor adolescente Carlos Fariña, las "ilegalidades" se produjeron más o menos de esta manera: "el adolecente fue detenido durante el transcurso de un allanamiento practicado en dicha población". Es importante apreciar el momento, el 13 de octubre de 1973, es decir a 32 días del derrocamiento del gobierno de la UP, en la fecha el país se encontraba en Estado de Sitio y los allanamientos eran frecuentes en poblaciones como "La Pincoya", ya que en ellas se produjeron enfrentamientos en contra de la autoridad; tanto elementos de la izquierda como delincuentes se resistieron a las disposiciones políticas y de seguridad ciudadana que impuso mediante DL la Junta Militar de Gobierno.
"La madre del menor, doña Josefina Oyarce Vda., de Fariña, relato así los hechos: "...A las 09:30 horas mi modesto domicilio fue cercado por numerosos Militares y Carabineros. Dos carabineros, cuatro militares y dos personas vestidas de civil irrumpieron en mi casa y exigieron que les entregara a Carlos Patricio. Traté de darles explicaciones, pero no me escucharon. Dos carabineros sacaron al niño desde su cama y uno de ellos -de la dotación de la Comisaría de Conchalí- le dio un fuerte culatazo en el pecho, por lo que el niño cayó, lo llevaron casi arrastrándolo hasta la cancha de fútbol. En la cancha se habían agrupado a las personas sospechosas, los militares dejaban ir a algunos y mantenían detenidos a otros; me acerqué al Oficial que comandaba la tropa, suplicándole que me entregara el niño porque estaba enfermo y diciéndole que lo llevaría al juzgado apenas se mejorara. El Oficial me respondió que me alejara y que me entregaría al niño cuando estuviera grande.
En un jeep militar, encañonado por dos militares, se llevaron a mi hijo con destino desconocido. Desde entonces no lo he vuelto a ver". Los militares que tomaron parte del allanamiento y detención del Carlos Fariña, pertenecían al Regimiento de Infantería Nº 3 de San Felipe, el que se encontraba acantonado en el recinto de Quinta Normal, todos se presentaron uniformados y armados conforme a lo requerido por la situación. Existe un testigo, un chofer de microbús que conocía a la familia y el cual de acuerdo a instrucciones de la autoridad, prestaba servicios trasladando efectivos acantonados en el parque Quinta Normal. En el interior de ese recinto, el chofer avisto al adolescente detenido, Carlos Fariña , con quien incluso logró intercambiar algunas palabras.
¿Por qué la detención?
Días antes, Carlos Fariña había sido detenido y conducido al Juzgado de Letras de Menores, acompañado por su madre, luego que se le disparara una pistola que le había recibido de un delincuente habitual mayor, para ser ocultada.Los "bandos" vigentes en aquellos meses, obligaban a que todas las armas en posesión de civiles debían ser entregadas a la autoridad, y la consecuencia del ocultamiento de ellas, sería castigado conforme a la situación que determinaran las leyes vigentes en el Estado de Sitio, declarado.
Como consecuencia de la irresponsable manipulación del arma, con la que el adolescente Carlos Fariña alardeó su posesión frente a otros menores, un tiro disparado casual o intencionalmente, no se sabe, hirió a pequeño niño de 6 años, hijo de una vecina, la que legítimamente, según se menciona en el recurso de amparo, habría denunciado al menor Fariña a las fuerzas militares que rodeaban el sector allanado, y esto debido a que la madre del menor herido, habría constatado que Carlos Fariña se había fugado del recinto donde estaba detenido.
Las circunstancias en que resultó herido el niño vecino, habrían ocurrido a finales de septiembre. El adolescente Fariña junto a sus dos hermanos de 14 y 3 años de edad, como es habitual en la mayoría de los hogares pobres de nuestro país, no recibían el cuidado correspondiente.Por razones del fallecimiento de su padre, y que su madre enferma de cáncer, se veía obligada a trabajar para sostener el hogar, estos permanecían la mayor parte del tiempo solos.Este deteriorado cuadro familiar, brindó la oportunidad para que el delincuente habitual que ya mencionamos, consiguiera que Carlos Fariña se prestara para ocultar el arma, no se conocen informes que aseguren una relación delictiva entre el adolescente Carlos Fariña y el delincuente mayor, no obstante de acuerdo a los patrones de comportamiento conocidos, las bandas de delincuentes de estas poblaciones estan integradas y usan a los menores para evadir los efectos de la Ley.
En cualquier circunstancia, Carlos Fariña, manipulando el arma hirió al niño de 6 años; El adolescente, al ver al niño herido, huyo del lugar de los hechos. Al menor herido se le proporcionaron los auxilios correspondientes, y su madre hizo la denuncia a Carabineros.
La madre de Carlos Fariña enterada de los hechos y de que la vecina había hecho la denuncia en Carabineros, presentó al adolescente al Juzgado de Menores, el Tribunal dio orden de ingreso a la Casa de Menores. Según versiones que no constan, en dicho recinto el menor habría sido víctima de abuso sexual, razón por la cual se habría fugado y regresado a su casa.
Según lo estableció la madre, Carlos Fariña habría estado con altas temperaturas (?), y ella esperaba que se recuperara para ir a poner en conocimiento de estos graves hechos a la Juez de Menores. La vecina, desconocía la razones del por qué Carlos Fariña se había fugado del Centro de Detención, por lo que dio cuenta de su presencia a los uniformados que allanaban el sector.
Lo repudiable de la situación.Después de la detención llevada a efecto por los militares y carabineros, Carlos Patricio Fariña Oyarce...desapareció. La madre y otras personas realizaron innumerables gestiones para tratar de ubicarlo. Con fecha 2 de abril de 1974 interpuso un recurso de amparo ante la Corte de Apelaciones de Santiago, por mucho tiempo indagó por su paradero o saber que le había pasado en manos de sus captores, lamentablemente todos los esfuerzos resultaron inútiles.La Sra. Josefina Oyarce, vda. de Fariña falleció, víctima de cáncer, el 22 de noviembre de 1977, sin conocer del paradero o suerte corrida por su hijo. Su hermano, el menor ya en otras circunstancias y de acuerdo al marco impuesto por los partidos de izquierda y organizaciones afines a la "lucha" por los DD.HH. (sic), retomó la búsqueda cuando fue mayor.
Cabe nuevamente preguntarse, por muy dolorosa que sean las consecuencias de una situación probadamente ilegal, ¿Debe esta repararse con más ilegalidades?¿De quién es la obligación de establecer las responsabilidades?¿Por qué involucrar toda una obra, la del GM, con hechos delictivos?¿Por qué se tienen que pasar por alto las circunstancias, el contexto histórico, y las razones de como se llegaron a los hechos?
El Ex presidente Pinochet, las FF.AA., y de Orden y su gobierno, merecen ser juzgadas, pero todo ello dentro de un marco político e histórico. Dictadores como Abdul Hamid y su masacre de los armenios en Turquía, Vladimir Lenin y los millares de muertos de su revolución, Mussolini y las masacres en Etiopía, Stalin el genocidio ucraniano, Rafael Trujillo y su sangrienta dictadura en República Dominicana, Adofo Hitler y el holocausto judío, Kim Il Sung en Corea del Norte, Mao y su aporte de 20 millones de chinos asesinados, Sukarno en Indonesia, Papa Doc Duvalier, en la pequeña Haiti, Nicolás Ceausescu en la comunista Rumania, Mobuto del Congo Belga, pagado por la CIA, Bokasa, Kadafi, Amín, el genocida Pol Pot en Camboya, Khomeini en Irán. etcétera, etcétera. etcéteras...
En Chile se han dado el lujo de meter en el mismo saco a nuestros organismos de seguridad que lucharon en contra de un enemigo soterrado, hipócrita y cobarde, comparando las acciones de la DINA de la CNI y otros, con la Gestapo, con la Cheka, con la KGB, con la STASI, organismo que asesinaron, deportaron, mantuvieron campos de concentración, manicomios, permanentes habilitados para los disidentes políticos, mantuvieron, con la misma CIA, que ve obligada a luchar cruentamente en contra del terrorismo suicida.
¿Quién osa juzgar? al gobierno español que ha torturado y asesinado a miembros de la ETA, a los ingleses que ajusticiado y torturado a los del IRA, pero sin ir más lejos a los gobiernos de la "concertación" que se han visto obligados a pelear con los "mapuches".
Las acciones de Ernesto Guevara, Fidel Castro, su hermano, De la Guardia, en especial Piñeiro Losada, jefe de los servicios secretos cubanos por muchos años, que se han llevado la vida de cientos de miles de cubanos, y que se relacionó estrechamente con Chile, cuando organizó las brigadas de choque y las hordas armadas de la UP, y después desde Cuba se encargo de dirigir y organizar los ataques y el terrorismo en contra del GM.
Nuestros agentes de seguridad, sus desaciertos no tienen comparación, con las atrocidades cometidas por los criminales de la izquierda, y esto es serio, estos criminales que nunca fueron juzgados, pasan por haber cometidos delitos de espionaje, terrorismo, sabotajes, delitos que trajeron consecuencias desbastadoras sobre nuestra Nación, de las que hasta el día de hoy no nos reponemos.
CARLOS PATRICIO FARIÑA OYARCE Rut : Sin documentos de identidad
F.Nacim. : 06-11-59, 13 años a la fecha de la detenciónDomicilio : Los Músicos 6075, La Pincoya (ex Manzana J, sitio I), ConchalíE.Civil : SolteroActividad : Estudiante de Enseñanza Básica, Escuela Perú - Quinta BellaC.Repres. : Sin militancia políticaF.Detenc. : 13 de octubre de 1973
GESTIONES JUDICIALES Y/O ADMINISTRATIVASLa madre del menor concurrió a la Secretaría Ejecutiva Nacional de Detenidos (SENDET), a diversas Comisarías de Carabineros de la capital, a los regimientos Tacna, Buin y San Bernardo en pos del paradero de su hijo, sin resultados positivos. Asimismo realizó gestiones en el Instituto Médico Legal.Con fecha 2 de abril de 1974 interpuso un recurso de amparo ante la Corte de Apelaciones de Santiago, el que roló con el número 299-74. En él se solicitó diversos Oficios, destinados a obtener información acerca del detenido: Ministro de Defensa, con el objeto de identificar al Regimiento que tenía su sede en el interior de la Quinta Normal el día 13 de octubre de 1973; al Prefecto de Carabineros de Santiago, al Jefe de la Policía de Menores y a la Secretaría Ejecutiva Nacional de Detenidos.
Sin decretar ninguna de las diligencias, el recurso fue agregado a la tabla extraordinaria el día 2 de abril de 1974. Con fecha 3 de abril, la sala ordenó que para entrar al conocimiento del recurso se oficiara al Ministro del Interior para que informara si estaba detenido el amparado, sin decretar las diligencias solicitadas por el recurrente. Recién el 30 de mayo de 1974 respondió el Oficio el General Oscar Bonilla, Ministro del Interior, señalando que Carlos Fariña "no se encuentra detenido y que este Ministerio ignora su actual paradero".Con fecha 15 de junio, la Corte ofició al Ministerio de Defensa, organismo que respondió al requerimiento judicial el 24 de octubre de 1974 en los siguientes términos: "por tratarse de personas denunciadas a la Justicia Militar, los informes correspondientes fueron remitidos al Ministerio del Interior". En definitiva, el 14 de noviembre de 1974, siete meses después de haberse solicitado el amparo, la Corte declaró sin lugar el habeas corpus, remitiendo los antecedentes al Juzgado del Crimen que corresponda.Con fecha 14 de junio de 1976, la Sra. Oyarce, presentó una denuncia por el secuestro de su hijo Carlos Patricio Fariña ante el 3er. Juzgado del Crimen de Santiago, Tribunal que ordenó enviar los antecedentes al 10° Juzgado por haberse perpetrado lo hechos denunciados en el territorio de éste. El 21 de junio, el 10° Juzgado del Crimen aceptó la competencia y ordenó instruir el sumario correspondiente. Entre la sucesión de informes negativos de las diferentes autoridades requeridas, cabe destacar el del Subsecretario de Guerra, de 14 de julio de 1976, en el cual consta que correspondió al Regimiento de Infantería de Montaña N°3 Yungay, de San Felipe, acantonarse en la Quinta Normal desde el 11 de septiembre de 1973 y hasta el término de ese año en el lugar mencionado.
El Comandante de esa Unidad corrobora la información, aunque limita la presencia del Regimiento en la Quinta Normal sólo hasta el mes de noviembre de 1973 y en relación con la detención del menor Fariña Oyarce, niega que ésta se haya practicado.Con fecha 6 de septiembre de 1976, el Juez sobreseyó temporalmente la causa y la Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la resolución el 13 de octubre del mismo año.El Gobierno de Chile informó a la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas que el afectado "no tiene existencia legal", en circunstancias que la identidad del menor Carlos Patricio Fariña Oyarce se encuentra debida e irrefutablemente establecida con su correspondiente certificado de nacimiento debidamente inscrito y libreta de familia.
No tenía cédula de identidad, en ese tiempo los menores no sacaban ese documento.Los antecedentes antropomórficos de Carlos Patricio Fariña Oyarce fueron anexados a la causa 4449-AF del 22 Juzgado del Crimen de Santiago por el delito de inhumación ilegal en el Patio 29 del Cementerio General, de personas no identificadas, muertas entre septiembre y diciembre de 1973.
El Juez Instructor de la causa ordenó la excavación de 108 tumbas en septiembre de 1991. De allí se exhumaron 125 cuerpos, los que fueron remitidos al Instituto Médico Legal. En la actualidad (fines de 1992) se está a la espera de los informes periciales de identificación.Actualidad:El Mercurio 10 de Agosto 2000Encuentran osamentas de niño de 13 años detenido desaparecido A un niño detenido desaparecido de 13 años de edad, quien fue sacado de su hogar en la población La Pincoya por efectivos militares tras el levantamiento militar en 1973, corresponden las osamentas que fueron encontradas el pasado 30 de junio en la comuna de Pudahuel. Según los peritajes efectuados por el Instituto Médico Legal, los restos humanos corresponden al de Carlos Fariña. Estos fueron encontrados enterrados a 60 centimetros de profundidad en la esquina de Américo Vespucio con San Pablo. En declaraciones a "Televisión Nacional", el hermano de la víctima, Iván Fariña, señaló que "el saber que lo encontré, por un lado me da alegría, y me da mucha pena y mucha rabia saber cómo lo encontré, saber que tenía muchos impactos de bala", muchos impactos en la cabeza, disparos en la espalda".
El Mercurio 14 de Agosto 2000Nueva querella contra Pinochet por muerte de niño de 13 años La querella número 163 presentó hoy el abogado Nelson Caucoto contra el senador Augusto Pinochet, por la muerte del niño Carlos Fariña Oyarce, de 13 años, quien es la víctima más joven del gobierno militar. El abogado Nelson Caucoto interpuso hoy un libelo acusatorio en contra del general (r) Pinochet por los delitos de secuestro, homicidio e inhumacion ilegal de Carlos Fariña. El niño fue detenido y posteriormente muerto en octubre de 1973. El 30 de junio último, peritos del Servicio Médico Legal encontraron los restos de Fariña Oyarce en el sector de calle San Pablo con Avenida Américo Vespucio en la comuna de Pudahuel, presentando 12 impactos de balas. El delito de sustracción de menores está contemplado como no admistiable según el decreto ley publicado el 18 de abril de 1978. Por esta razón, señaló Caucoto es posible iniciar una investigación y dar con los responsables y condenarlos.
Ref:Informe Retigg"El Mercurio"Memoria VivaFuente:
